Montjuic. Barcelona, España. Foto: Rubén Villegas |
El sueño de muchos como yo es viajar. Conocer nuevas culturas, ver otros paisajes que nos saquen de la rutina del trabajo y nos den un poco de nuevas energías físicas y mentales que nos ayuden a sobrellevar el día a día.
Pero siempre hay un problema, el dinero. En especial cuando eres inmigrante y muchas veces tienes obligaciones más allá de lo que es tu propia supervivencia. Hijos, gente querida en otros países o ahorro para sacar del infierno socialista a los tuyos.
Viajar implica un gasto. Un gasto que yo miro como inversión, ya que es ganancia para mi mente y mi estabilidad emocional. En la medida en que yo esté más sano, puedo ayudar mejor a los míos. Así que no lo miro como un lujo sino como algo tan necesario como un chequeo médico.
Artículo relacionado 👉Sobreviviendo a la migración. Cinco consejos prácticos.
Yo no sé de cuanto es tu presupuesto pero conozco bien el mío, el cual es bastante limitado. No sé cuánto quieres gastar ni a dónde quieres viajar. Esta guía es para mi target propio: clase media baja devaluada, pobre pero honrado. O simplemente pelabolas como yo que queremos recorrer toda España.
Agarra dato:
Planificación: No esperes a un día antes de las vacaciones para decidir a dónde ir. Piensa desde ya qué lugar te gustaría visitar y comienza a buscar información sobre el lugar. Visualízalo, siéntelo. Es un compromiso contigo. Tu regalo luego de sacrificar muchas cervezas de fin de semana o de andar malgastando plata en quien ya te mandó a la friendzone.
Obviamente cada ciudad tiene su propio standard económico. Barcelona, Madrid y Sevilla son más costosas que Oviedo, Cádiz o Toledo. A mayor costo, mayor planificación.
Igualmente toma en cuenta el clima. El sur de España es bastante caluroso en verano, con temperaturas que van de los 35 a 50 grados. En el norte llueve constantemente. Así como toma nota de los días festivos de esa localidad.
Igualmente toma en cuenta el clima. El sur de España es bastante caluroso en verano, con temperaturas que van de los 35 a 50 grados. En el norte llueve constantemente. Así como toma nota de los días festivos de esa localidad.
Ahorro: Ahorrar es tan difícil como seguir una dieta. Es un compromiso. Debes destinar un porcentaje fijo de tus ingresos. Mételos debajo del colchón o en una chaqueta que nunca te pones. Eso incluye cualquier entrada extra por matanzas de tigres. No pierdas de vista la meta.
Esto te va a interesar 👉 España para principiantes. Guía para inmigrantes
Equipaje: Lleva la menor cantidad posible. Las aerolíneas de bajo coste te cobran extra si tu equipaje no es de mano. Así que si son dos, podrían meter todo en una sola maleta o llevar dos bolsos de mano. En invierno es un poco más complicado hacerlo porque usas más ropa. Así que busca un abrigo que te dé calor suficiente como para que no necesites muchas prendas por debajo.
Transporte: Si estás legal en España puedes tomar cualquier medio de transporte, obviamente. Incluso, quienes tienen la famosa tarjeta roja de solicitud de protección internacional, pueden viajar en avión o autobús sin ningún problema.
Para pasajes de avión, busca en aerolíneas de bajo costo como Vueling o RyanAir. Iberia también tiene vuelos dentro del territorio español. Si compras con al menos dos meses de antelación, un vuelo te puede salir más económico que un autobús o el tren. A medida que lo compres más cerca del dia del viaje, será más costoso.
Hay páginas como Skyscanner y Omnio que funcionan como buscadores de pasajes. Son bastante útiles. Una vez localizado el vuelo o tren, vete directo a la web de la compañía y busca ese boleto allí. Así te ahorras la comisión y hasta te pueden hacer descuentos especiales.
Te añado algunos otros sitios web de interés:
ALSA: Empresas de traslados en autobús.
RENFE: Ferrocarriles.
BlaBlaCar: Traslado extraurbano en coches compartidos.
Para moverte dentro de la ciudad o pueblo, evita los taxis. Investiga si puedes adquirir alguna tarjeta de transporte público que sea multifuncional como las que puedes conseguir en Madrid, Barcelona, Sevilla, Bilbao o Valencia.
Hospedaje: Una vez que tengas definido el día de viaje y de regreso, busca dónde quedarte. La idea es pasear y conocer, así que mi exigencia respecto a hoteles es que no me roben el equipaje y que los insectos respeten mi espacio personal. Puedes buscar hostales si no te importa compartir la habitación con otras personas, ver promociones en Airbnb si te interesa un piso completo y por supuesto revisar Booking para tener una mejor idea de los precios según tus necesidades.
Siempre busca hospedarte en lugares céntricos, ya que puedo recorrer los principales lugares de la ciudad sin tomar buses o el metro. Por ejemplo, si te hospedas en el Barrio Gótico de Barcelona tienes muchos monumentos, plazas, parques y la playa donde fácilmente puedes ir caminando. Repito, la idea es conocer y prefiero invertir tiempo y dinero en este aspecto.
Artículo relacionado 👉 Emigrando a España. Preguntas frecuentes
Conocer la ciudad: Recorre primero los sitios que tengas cercanos y familiarizate con las calles de tu entorno. También busca espectáculos gratuitos o de bajo coste. Muchas ciudades y pueblos hacen Ferias y se presentan buenos artistas. Pasarás un buen rato y conocerás mucho de la idiosincrasia española.
Los lunes son los días en que muchos museos y sitios históricos ofrecen entrada gratuita, como el Reina Sofía o El Prado en Madrid. Averigua cuáles son los días y horarios con entrada libre en el lugar que te encuentras y planifica tu itinerario en base a eso.
Comida: La idea de viajar es conocer otras culturas. Y mucha de la cultura está ligada a la comida y la bebida. Elige sitios donde van los habitantes a comer, a tomarse un café o una cañita. Evita franquicias. Integrate a las taguaras locales y autóctonas. En la mayoría se come más rico y se bebe más barato que en los sitios para "guiris" (turistas). Por lo general son los lugares con mayor cantidad de clientes. Fijate bien en el tipo de personas en las mesas. Revisa la puntuación y los comentarios sobre estos lugares en Google o Tripadvisor.
Y por último, diviértete. Dale valor extra a tu esfuerzo en el trabajo. Prémiate por tu salud. Toma miles de fotografías y siempre ten presente que nuestro mayor deber es coleccionar momentos de felicidad.